Saturday, February 19, 2011

ABUSADO (continúa):

Lo había planeado todo, ella realmente lo hizo pero aún así Droogie confiaba en mí lo suficiente como para llevar esto a cabo. Era como si por alguna jodida razón hubiéramos hecho una conexión desde el primer día en que se cruzó en mi camino, pero ya se sentía como algo más profundo que iba más allá de la atracción sexual, hasta podría decir que era una especie de amistad espiritual...pero sí, sabía que era increíblemente astuta porque compartíamos la misma naturaleza, en el fondo éramos unas viles criatura de la noche dispuestas a demostrar de lo que éramos capaces en una noche como hoy.

Los tipos misteriosos de las jaulas salieron tan pronto como cayeron las cortinas y al clamor de la diva quien dijo,

- Vaya, con que allí están Cupido y Bromista! Tráiganme a algunos jóvenes droogs y lindas devotchkas para probar que tan bien o terriblemente mal portado han sido este año!-

Así que las primeras víctimas de la noche fueron una voluptuosa rubia y un hermano negro alto y bastante bien fornido como de aquellos con quienes me juntaba en Brooklyn. Según Droogie fueron escogidos al azar para sus fechorías y para entretenimiento de los demás.

El juego era simple pero se volvió más retorcido mientras transcurría la noche; cada conejo sacaba dos ideas distintas, a algunas sí les hallaba sentido, a otras no tanto.

- Así que cuál será el destino de nuestros invitados Donna y Glitzen?- preguntó Droogie esperando que la pareja se llevara una gran sorpresa. Desafortunadamente sólo era BESA A LA CHICA.

- Bien, muy bien! Santa seguramente estará complacido con ustedes! Ahora démosle la bienvenida a otra feliz pareja y para entrar en calor navideño hemos traido nuestro propio muérdago. Veamos, quién será esta vez, tengo un fuerte presentimiento...-

Todos se volvían locos sobre quién sería el siguiente; Edith y yo simplemente volteabamos y nos parecía muy gracioso cómo los demás lucían pegados a los encantos de esta joven cantante de pesadilla; algunos le rendían culto mientras que otros casi la crucifican, pero de seguro nadie le mostraba indiferencia...excepto yo, y creo que ése fue mi peor error ya que me hacía verme más obvio.

Y así yo fui tomado 'a la fuerza' por los secuaces para ser otro afortunado participante así como alguien más que resultó ser un chico. Era rubio platinado, medio delgado, probablemente de unos veintitantos, nada fuera de lo ordinario, pero creo que yo era más lindo.

- Vaya, vaya, vaya, de veras que tenemos a dos jóvenes y deseables bombones, malo, malo, malos conejitos, qué es lo que han hecho esta vez?- dijo ella. De alguna manera no estaba muerto de miedo porque algo tenía pararse frente a un escenario que me cargaba de una confianza ciega, tan poderosa que me sentía en la cima del mundo.

Ella hizo como si no me conociera, - Y quién se supone que eres tú?-

Obviamente mencioné mi nombre. -Y qué tal tú, cariño, acaso te sientes con suerte esta noche, creen que me les pueda unir y hacer un terrible trío?- le dijo al chico rubio medio mudo. - Qué me dicen Donna y Glitzen, veamos qué sopresa les tenemos...-

Dios, sacaron las palabras BESA AL CHICO.

- No, no, no, Charlie, yo no soy quien debe besarte, es entre ustedes dos!-

La multitud estaba eufórica pero al mismo tiempo las chicas gritaban aterrorizadas. Charlie lo pensó un poco y yo me quise alejar pero no lo hice porque era solamente un juego, como en los días de la universidad.

Sin embargo, ya casi no veía a Edith, pero si sé que si se hubiera opuesto a esto ella sería la primera en haber gritado; desafortunadamente hacía mucho ruido.

Así que caminé hacia un lado del escenario y resultaba que todos me estaban apoyando.

- Ah, vamos, Droogie se está poniendo bastante triste pues no ve que haya mucho amor en el aire...- e hizo un enorme gesto de disgusto.

Entonces supe que no tenía elección, - Ah, qué Diablos, lo que sea por tí, precisosa!- grité. Así que lo hice, finalmente besé a Charlie sabiendo que era por pura diversión pero resultó ser que él lo estaba disfrutando bastante ya que mantuvo su boca abierta todo el tiempo. Aún no me dejaría someter. Ese momento duró algo así como casi dos minutos pero se sintió como una eternidad ya que Charlie se sentía tan a gusto a mi lado solamente esperaba que no se prendiera de mí en serio.

- MALO, MALO, MALO, EXCELENTE! BASTANTE BIEN QUE LO HAN HECHO, CORAZONES! Démosles un cálido aplauso,- exclamó la complacida Droogie.

No comments:

Post a Comment