Thursday, March 10, 2011

DESPIERTO.

Ah, Demonios, sentía que la cama estaba tan increíblemente dura y pude notar que estaba conectado a unos tubos...no, no el hospital de nuevo.

- No es cualquier hospital,- ésa voz, era la de Caroline sin duda. Estaba sentada junto a mi cama. - Éste es Saint Vincent.-

- No puede ser,- continué. - Ése lugar cerró hace meses, a menos que yo esté en el pasado.-

- NO, es el presente, en serio, - dijo en un tono bastante sereno. Esta vez no lucía para nada enojada, hasta su vestido era de un azul pálido, como la última vez que la ví.

- Entonces por qué me trajiste aquí?-

- Creo que aquí es donde morí, como tanta otra gente inocente.-

- Me apena escuchar eso. Escucha..." dije llevándome la mano a la nuca. - He tenido una noche muy pesada y al parecer tú fuiste la culpable, así que POR FAVOR puedo irme ya a mi casa?-

- Aprendiste algo en este maravilloso viaje?- dijo cruzada de brazos.

- SI! Las pinturas, son el puente que conecta con las mentes de otras personas. El única problema es que nunca sabré quién entra a mi inconsciente.-

- Y por eso deberás ser más selectivo! Esa chica Lindsay no me parece una buena elección.-

- Para qué?-

- Para los Mil, claro!-

- Dios, estoy harto de esta basura! Lo siento, sólo quiero ira a casa...estoy cansado y adolorido.-

- Está bien, supongo que tienes razón. He sido un poco egoista, además, el año casi termina...vuelve a dormir pero trata de pensar en cosas lindas esta vez.-

- Eso es fácil.-

- No después de lo que experimentaste así que concéntrate bien, Adrian.-

- Edith, ella es la única que parece más amable que cualquier otra persona que jamás he conocido...- Sumí mi cabeza entre las almohadas repitiendo una y otra vez su nombre, -vuelve, Edith, vuelve Edith...-

No comments:

Post a Comment